Nunca soñé,
Jamás imaginé
Que mi mundo dado
vuelta sería.
Yo soñaba
Otra realidad.
Una más acomodad a mi
realidad de entonces.
Pero de pronto
Tú llegaste
Y tu magia hiciste.
Me engatusaste
Y no me dejaste.
La única
Que tu corazón
gobierna.
Tu amiga,
Tu novia,
Tu confidente
Por siempre soy.
Eres el caballero en
armadura dorada
Montando un corcel blanco
Que vino a rescatarme
De mí misma,
De mi soledad,
De mi vida aburrida.
Sé que a ti no te
gusta,
Pero me siento “agradecida”
contigo:
Te empeñaste en
conquistar mi corazón,
Te empeñaste en
ganarme,
Te empeñaste y lo
lograste.
Este no será un gran
poema
Y aún así quiero que
todos los sepan.
Ahora estoy mejor
contigo,
Siento que puedo
lograr que me proponga.
Con mucha paciencia y
perseverancia
Sé que lo haré.
Y amor,
Si lloro tanto es que
Se me metió un “Te amo tanto” en los ojos.
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